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Fortalece tu Vitalidad

PASO 3
FORTALECE TU VITALIDAD
REGENERA TU ORGANISMO:


Este paso, crucial para definir nuestra salud, puede tomar entre 1 y 3 años.
La perseverancia en las recomendaciones que damos es la que, al final, dará su fruto: Un organismo vital y saludable.
Por la importancia del tema, vamos a dividir esta etapa en dos fases.
La primera de ellas la llamaremos FORTALECIENDO SU VITALIDAD.
La mejor forma de fortalecer la vitalidad del organismo se hace estimulando el Sistema Inmunológico del organismo.



¿Cómo fortalecer nuestro sistema inmunológico?
(Artículo tomado de:https://www.salud.mapfre.es/cuerpo-y-mente/habitos-saludables/como-fortalecer-nuestro-sistema-inmunologico/)

Nuestras defensas pueden verse alteradas por múltiples factores; unos dependerán de nosotros y otros no

Durante ciertas épocas del año bajamos la guardia y modificamos nuestras rutinas: cambiamos los horarios de las comidas, los horarios de sueño, etc. Este tipo de conductas ponen a prueba a nuestros mecanismos defensivos, comprometiendo con ello nuestro estado de salud. Por otro lado, el medio ambiente supone un continuo desafío para nuestras defensas: la contaminación, los químicos tóxicos, bacterias, virus y hongos añaden estrés al sistema inmunológico.

Muchos son los factores que pueden alterar nuestras defensas; unos no dependerán de nosotros, puesto que son factores internos (enfermedades autoinmunes, cambios estacionales, edades extremas de la vida…), pero existen otros factores externos sobre los cuales sí podemos actuar.

Seguro que entre los siguientes ejemplos todos reconocemos al menos un par de enemigos del sistema inmunológico presentes en nuestra vida cotidiana: una alimentación desequilibrada, el humo del tabaco, la cafeína, la contaminación ambiental, el estrés, el sedentarismo, el exceso de ejercicio físico, provocan que nuestro organismo y sistema inmunológico se debilite, facilitando el contagio de infecciones a pesar de las principales vacunas (catarros, gripes, cistitis, etc.) y una mayor duración de las mismas.

La alimentación es un factor muy importante para el sistema inmunológico. Si es inadecuada o insuficiente se produce una caída de las defensas; si es equilibrada, las mantiene en forma o las fortalece.

¿Cuándo debemos sospechar que nuestras defensas están bajas?
Hay síntomas que nos pueden dar pistas, como pupas en los labios, cansancio” mayor de lo habitual”, heridas que tardan en cicatrizar, dolores musculares sin haber practicado ejercicio y fragilidad del cabello.

El final de las vacaciones estivales es un buen momento para ayudar a nuestro sistema inmunológico a hacer frente a los agentes patógenos que lo atacan. Unas buenas estrategias para aumentar la inmunidad natural las encontramos en la alimentación y el ejercicio físico.

La alimentación es un factor muy importante para el sistema inmunológico. Existe una relación directa entre ambos, ya que si ésta es inadecuada o insuficiente se produce una caída de las defensas, y por el contrario, si es equilibrada y completa, ayuda a mantenerlas en forma o incluso las fortalece.


Siguiendo unos consejos alimentarios sencillos nos cargaremos de energía para afrontar la vuelta al trabajo, y en el caso de los niños, la vuelta al colegio. No olvidemos que hay que comer de todo: una dieta variada con una proporción adecuada de todos los nutrientes (grasas, hidratos de carbono, proteínas, vitaminas, minerales) nos garantiza un equilibrio interno que a la vez sirve como escudo protector.

Las dietas ricas en grasas reducen la respuesta inmunológica; no obstante, no es sólo una cuestión de cantidad, ya que la procedencia de las grasas que introducimos en nuestra dieta también es importante. Conviene incluir grasas monoinsaturadas, presentes en el pescado azul, frutos secos, aceite de oliva, girasol o soja. Consumir regularmente productos lácteos fermentados (yogur, kefir) contribuye a aumentar las defensas.

Otros nutrientes relacionados con el sistema inmunológico
Vitamina C: reduce la duración y la severidad de las gripes y resfriados. La encontramos en frutas, verduras y hortalizas, como las fresas, el kiwi, cítricos, melón, pimiento, tomate y col.
Vitamina A: contribuye a mantener las barreras naturales contra las infecciones (mucosas). La encontramos en hígado, mantequilla, nata, huevos, lácteos y algunas frutas como el albaricoque, cerezas, melón y melocotón.
Vitamina E: aumenta la respuesta inmunológica. Presente en aceite de germen de trigo, de soja, cereales (pan, arroz, pasta integral…), aceite de oliva, vegetales de hoja verde y frutos secos.
Otras vitaminas: tienen especial importancia las vitaminas del grupo B; tanto los alimentos de origen vegetal como animal son ricos en ella: carne, vísceras, pescado, marisco, huevos, cereales, legumbres, frutas, verduras de hoja verde…
Hierro: hígado, carne, pescado y huevos.
Zinc y selenio: presentes en casi todos los grupos de alimentos.
Practicar regularmente ejercicio físico
En general, es preferible practicar algún tipo de ejercicio aeróbico, que permita mover muchas partes del cuerpo a la vez, como nadar o montar en bicicleta. La intensidad del ejercicio ha de ser moderada, esforzarse hasta perder el aliento nunca es recomendable.

Evita el sobreesfuerzo. Si no estás acostumbrado a hacer ejercicio, debes empezar a practicarlo con moderación, adaptándolo a tu condición física y edad. Progresivamente podrás ir aumentando la intensidad del ejercicio físico, pero siempre evitando cansarte demasiado.

No debemos olvidar otros dos factores importantes: el descanso nocturno, respetando el tiempo del sueño (entre 6 y 8 horas), ya que algunas de las células de las defensas se producen durante el descanso; y el cuidado de nuestra piel, la barrera física que mantiene a raya las infecciones.
Servicio Prevención Mancomunado MAPFRE
Publicado por canalSALUD - 3 noviembre 2016

Y de nuevo nuestra recomendación más valiosa: Consuma Ganoderma:

GANODERMA


Cápsulas de GANODERMA hay muchas en el mercado nacional e internacional. La que nosotros recomendamos, por la calidad de su fabricación, es de la empresa Gano Excel y se produce a partir de una combinación de 6 especies de Ganoderma - el "Rey Milagroso de Hierbas". Ganoderma suplemento herbal de Gano Excel apoya el bienestar general y estimula las defensas naturales del cuerpo. ¡Comprobado!
Registro Invima N° SD2014-0003428.
CÁPSULAS GANODERMA
El Hongo Rojo es identificado por su nombre científico de Ganoderma Lucidum. Con una reputación mundial por ser uno de los nutrientes más sinérgicos en cualquier lugar.
BENEFICIOS:
✓ 275 mg 1cápsula = 2.5 sobres Ganocafé.
✓ Combate la bacteria Helicobacter Pyloris para evitar la gastritis
✓ Ayuda a modular las defensas del cuerpo.
✓ Energiza sin hiper-excitar el cerebro.
✓ Rejuvenece.
✓ Actividad anticancerígena (Prevención y tratamiento de cáncer)
✓ Capacidad de regular el sistema inmunológico
✓ Actúa contra enfermedades autoinmunes como el lupus, artritis reumatoides, esclerosis múltiple, afecciones tiroideas.
✓ Trata enfermedades de la piel como la psoriasis, vitíligo, eczemas
✓ Capacidad de bajar los niveles de colesterol en la sangre
✓ Regula los niveles de azúcar en sangre, normaliza el metabolismo y evita
complicaciones renales para diabéticos
✓ Actividad antibacteriana (Sida)
✓ Regula la presión arterial
✓ Controla los niveles de colesterol
✓ Capacidad de inhibir la liberación de histamina para evitar el asma y alergias
✓ Inhibe la agregación plaquetaria (Trombosis)
✓ Acción hepatoprotectora
✓ Actividad antiinflamatoria para reducir hemorroides
✓ Acción efectiva contra la úlcera varicosa
Recomendamos tomar una cápsula de Ganoderma dos veces al dia, una en la mañana y otra en la noche, durante todo el proceso de fortalecimiento y regeneración del cuerpo (puede tomar hasta 3 años)
Registro Invima N° SD2014-0003428

Continuar con la segunda parte de este TERCER PASO  - RESTAURAR Y REGENERAR TU CUERPO

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